La mayoría de partícipes de fondos mutuos del Perú está parqueada en “cash” desde el 2013, con graves consecuencias en términos de rentabilidad perdida.
El 22 de mayo de 2013, la Reserva Federal de USA (“Fed”), Ben Bernanke, anunció que dejaría de comprar bonos para apoyar la recuperación de la economía de USA. El resultado fue un repunte de tasas de interés que generó pérdidas en los activos de renta fija a nivel global. Este episodio es conocido como el “Taper Tantrum,” algo así como la “pataleta” del mercado ante el fin del programa de estímulo monetario en USA.
En el mercado local de fondos mutuos, el efecto del “tantrum” se siente hasta hoy. los fondos mutuos de renta fija de mediano plazo perdieron alrededor de 4% en los días post “tantrum.” Desde entonces, los partícipes iniciaron un movimiento masivo hacia fondos mutuos de “cash.” En marzo de 2013 la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV) reportaba unos S/. 9,000 millones en fondos mutuos de renta fija clasificados como “de mediano y largo plazo”, unos S/. 1,500 millones más que los invertidos en fondos “de corto o muy corto plazo.” A mayo 2021, los montos en mediano y largo plazo han caído en casi dos tercios, a unos S/ 3,400 millones, mientras que de corto plazo se han disparado a S/. 20,900 millones, que suben a S/.30,000 millones si se incluyen los fondos de liquidez clasificados como “flexibles”. Colectivamente, el partícipe peruano todavía nos se recupera del “golpe” recibido hace 8 años.
Fuente: Superintendencia del Mercado de Valores
Los eventos que siguieron al “tantrum” parecieran haber dado la razón a los precavidos partícipes que retiraron sus fondos. En 2014 hubo una crisis de commodities; luego vino el “aterrizaje forzoso” de la economía China, el casi “Grexit”, “Brexit”, Trump, y una pandemia global que causó la caída más grande del PBI mundial desde la Gran Depresión. En medio de este caos, sin embargo, los mercados globales de bonos y acciones registraron resultados muy superiores a la liquidez. Por ejemplo, el mercado global de acciones, representado por el MSCI World Index, rindió 254% en soles desde mayo 2013 a fines del año pasado; el mercado de bonos de alto rendimiento (“high yield”) de USA avanzó 110%. El partícipe local, refugiado en cash por el susto que se llevó en el lejano 2013, ha dejado un cerro de plata sobre la mesa.
Que no panda el cúnico
En Blum pensamos que la estrategia implementada colectivamente por el mercado local (refugiarse en cash) constituye un error de asesoría. El “cash” es una opción válida, pero sólo para 1) quien invierte a muy corto plazo, o 2) quien tiene muy baja tolerancia al riesgo. Para los demás, esta opción resulta carísima, como muestra el diferencial en rentabilidad entre el cash y casi todas las clases de activos globales en la última década. Este episodio muestra la importancia de asesorar correctamente a los clientes, de manera que no tomen decisiones drásticas cada vez que cae el mercado. Si bien los resultados pasados no son garantía de resultados futuros, aprender a vivir con cierto nivel de volatilidad, invirtiendo en portafolios diversificados globalmente, tiene muy altas probabilidades de superar a la liquidez en el mediano y largo plazo.